Enfoque: Asegura que la decisión del Gobierno de retirar del Congreso dos proyectos emblemáticos, como el de DD.HH. y de flexibilidad laboral, no fue compartido por todos. Destaca que el Presidente Lagos "perdió la apuesta con sus proyectos estrellas", ya que las críticas de sus propios partidarios lo obligaron a postergarlos para el 2004. Explica que en el proyecto de DD.HH., la inflexible postura de organizaciones de DD.HH. y del PS impidieron que las conversaciones con otros dirigentes continuaran; en cuanto al proyecto de flexibilidad laboral, con él se esperaba disminuir el desempleo, pero tuvo la oposición de la CUT. Señala que los empresarios están tranquilos con el retraso, no así dirigentes como el senador DC Alejandro Foxley y el alcalde Joaquín Lavín. Remata diciendo que, si bien se espera discutir estos proyectos en un ambiente más tranquilo, "eso será difícil en un año electoral como será el próximo". Mandatario: Recibiendo a parlamentarios y saludando a empresarios. (imagen de archivo)