Enfoque: Señala que el Gobierno condenó enérgicamente la "afrenta" realizada a nuestro país en el Congreso peruano, luego de que el ministro de Defensa de ese país, Marciano Rengifo, botara al suelo la bandera de Chile. Destaca que el Presidente Toledo llamó por teléfono al Presidente Lagos para disculparse personalmente, lo que fue aceptado. Añade que si bien la Cancillería chilena aceptó las disculpas, calificó el hecho como un lamentable agravio que resulta desconcertante y contradictorio y el Ministro Walker dejó claro que ojalá estos episodios sensurables no se repitan, si no se desea perturbar las relaciones entre ambas naciones. Mandatario: "Él me planteó excusas en lo personal por lo que había ocurrido (...) Estos pequeños resquemores humanos, ante la vastedad de horizontes que tenemos, debieran desaparecer ante un futuro mucho más promisorio si trabajamos juntos"