Enfoque: El medio señala que dos altos efectivos en servicio activo de inteligencia del ejército, ingresaron al consulado argentino en Punta Arenas y fueron descubiertos por "el propio jefe de la representación consular". El Ministerio de Defensa de Chile reconoció que los uniformados "actuaron de forma independiente y sin instrucciones superiores" y debido a la gravedad de los hechos se pasó a retiro al coronel de ejército Víctor Poza Reyes, jefe de la Unidad de Inteligencia y se llamó de manera urgente al comandante de la Región Militar Austral Waldo Zauritz, "quien finalmente decidió presentar su renuncia". El episodio fue calificado de espionaje por Argentina y fue considerado uno de los momentos más "graves" desde el conflicto por el Beagle a fines de los años 70, por ello el Presidente Lagos telefoneó a su homólogo argentino y luego de una segunda reunión, el Gobierno trasandino dio por superado el incidente. Asegura que "en esferas castrenses y en el propio Gobierno" se lamenta la salida del General. Waldo Zauritz, "quien es considerado un oficial brillante y ejemplar que en el 2004 debía asumir como Jefe de la Guarnición de Santiago. Canciller Alvear manifestó que este comportamiento escapa a "lo que es la política del Gobierno del Presidente Lagos". Mandatario: Junto al Presidente Kirchner en Argentina (imagen de archivo)