Enfoque: Opina que la "implacable mano dura" que el Presidente Lagos dejó caer sobre los microbuseros no será la misma con que enfrentará a los médicos, lo que no impidió que "apuntara su dedo acusador en contra de los organizadores del paro" que pretende frenar la tramitación del Plan Auge, aunque descartó, por ahora, aplicar la ley de Seguridad del Estado. Indica que la estrategia del Gobierno fue ponerse del lado de los más afectados por la movilización, los pacientes, y denunciar que hubo 3 mil operaciones perdidas y más de $2.000 millones arrojados a la basura. Añade que el Mandatario aseguró que los proyectos de la Reforma de la Salud se seguirán discutiendo en el Congreso. Contrasta la versión de los gremios de la salud con la del Gobierno y sentencia que, "una vez más esto es un diálogo de sordos" Mandatario: "Y lo de hoy es la huelga perdida, porque terminará la huelga de hoy y se seguirá debatiendo en el Parlamento, que es allá donde se debate en democracia, y los que hoy están en huelga seguirán siendo escuchados en el Parlamento, como han sido escuchados en el Parlamento (...) "Lo que no va a tener arreglo son esos 3 mil chilenos y chilenas que hoy día iban a ser operados y que no se operaron, porque esos tres mil pacientes no se operaron hoy día no se recuperan. Porque si los opera mañana o pasado mañana, habrá otros que dejarán de ser operados"