Enfoque: Informa que, utilizando una moderna gráfica, el Presidente Lagos dio su mensaje de Fin de Año a la Nación, donde se le vio relajado y empático. Destaca que el Mandatario no eludió los temas esperados, como el desempleo lo cual ameritó un mea culpa y un nuevo crecimiento. Indica que el Jefe de Estado recalcó que en su primer año de gestión se afianzó una buena posición de Chile dentro de América Latina y, sobre asuntos internos, volvió a enviar el mensaje de la necesidad de hacer reformas a la Constitución. Comenta que ojalá el 2001 sea el año de la reconciliación, aunque las miradas y las formas de alcanzar este anhelo nacional siguen siendo muy distintas. Mandatario: "Saber que no logramos bajar los niveles de desempleo tan rápido como queríamos fue quizás el principal golpe que tuve en este primer año como Presidente de la República (...) Mi Gobierno va a seguir trabajando sin descanso, para crear más empleo, hacer que la economía siga creciendo, para que este crecimiento llegue a cada una de las familias chilenas (...) Necesitamos un país próspero, libertario, un país hondamente democrático, con una Constitución que represente el sentir de todos los chilenos (...) Es uno y simple: que reine entre nosotros, chilenos y chilenas, la unidad y el optimismo. Les pido a cada uno de ustedes que no se dejen derrotar por el pesimismo, por la desconfianza, por el derrotismo"