Enfoque: Destaca que frente al paro de micros, el discurso de las autoridades fue unitario y la ley de Seguridad del Estado fue invocada inmediatamente. Afirma que, con razón el paro hizo enojar al Presidente Lagos, por lo cual advirtió que todo el rigor de la ley caerá sobre los dirigentes del transporte, mientras en tribunales se presentaba un requerimiento por transgredir la ley de Seguridad del Estado. Usando un tono confrontacional, consigna que el Mandatario dijo que esto se tomará como la escaramuza definitiva y que la justicia llegará, lo que se reafirma con las primeras diligencias de un juez sumariante, a quien se le pidió la detención de los empresarios microbuseros. Especula que la orden del Jefe de Estado parece ser 'hay que darles con toda la artillería', pues mañana se cobrarán boletas de garantías por el servicio negado, que bordea US$ 1 millón y se advirtió que no habrá negociación, por lo cual dice que "la batalla está declarada". Mandatario: "Ellos no saben la gravedad de lo que han hecho y no saben la respuesta que van a tener (...) Le digo a los amigos del transporte que todo el rigor de la ley caerá sobre ellos (...) Si ésta es la primera escaramuza, la vamos a toamar como la definitiva. Y aquí van todos a acatar conclusiones. Cuando el Gobierno dice lo que se va a hacer en beneficio de la mayoría, con la mayoría de Chile no se juega (...) Espérese no más, espérese no más. La justicia tarda, pero llega"